Sigan andando.

Y piensan ustedes el porqué, la ducha es la reflexión de cada día; es el único momento que les libera del estrés y del agobio de la carretera.
Piensan en él en ella, en ellos.
El tiempo se para en la ducha, el agua del principio ( que siempre está fría ) despeja las ideas y errores que han cometido hoy, lanzándolos por el desagüe. Tarde o temprano tenían que quedarse ahí.
Esa esponja que hidrata sus cuerpos, es como el abrazo que han necesitado, pero que no ha llegado en todo el día; el calor " humano " del que tanto han oído hablar.
Dejen que el agua fluya por entre las cornisas de su espina dorsal; tal placer no se puede comparar con un polvo a media noche, o un beso de despedida en la puerta entre abierta del portal.
Porque ustedes también siguen a esa persona cuando sube el primer escalón de su bloque de pisos, ustedes también se quedan embobados con esos ojos y esas cejas, el contorno de esa dentadura y el olor que le hace inconfundible; es ella, es él.
Cierran el grifo del agua caliente y suspiran.
Parece que la ducha alivia el cansancio, pero ustedes también caen rendidos en el sofá después de esta.
Hace frío ¿ verdad ? Siempre hace frío al salir de la ducha, sea verano, invierno, otoño o primavera.
Y aquí tienen, otra vez, el calor " humano " que les ofrece la toalla.
Dura poco sí, hasta que se está seco, pero es confortable.
Y se visten, y se sienten más a gusto con la ropa que sin ella; y miren que el ser humano nació sin ropa. Ya estamos tan acostumbrados a que los calzoncillos nos aprieten los cojones (mujeres sin cojones, no sé qué sienten ustedes, jamás he tenido vagina ) que es una sensación que se extraña si no se tiene.
Y piensan, que mañana será otro autobús, más miradas, más comentarios, otro borracho andando por la calle, otra madre luchando por sacar a sus hijos adelante; otro coche que casi les atropella, otro vaso de agua, otra vez el almuerzo otra cena, otro documento, otro beso, otro polvo, otra ducha.
Otra reflexión.


" Y ahora, que ya no estoy a tu lado, probablemente ambos seamos mejores personas. El destino es una bala por la culata de la que no puedes salir bien parado; confórmate con salir, vive el olvido, el olvido es una calle cortada por los restos del derrumbe: una sonrisa mellada, un aliento de escombros; arrivederci Pinocho. "
Lichis.